
0.- Entrada y bienvenida
CANTO DE ENTRADA: INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
Entrada en procesión de los líderes de las diferentes tradiciones cristianas.
Palabras de Bienvenida:
Saludo de bienvenida (por el responsable del lugar que acoge la oración).
Monitor:
A lo largo de la historia, muchas actividades humanas han contribuido a la destrucción de la Creación, como sin duda vemos en las actuales guerras de Gaza, Ucrania y en otros conflictos armados activos en el mundo.
Sin embargo, hoy más que nunca, algunas actividades humanas adoptan la forma de una guerra contra la Creación. Algunos son los mayores responsables de esta crisis: el consumo de élite, los modelos empresariales explotadores y las teorías económicas que priorizan el beneficio sobre la sostenibilidad. La contaminación, las crisis sanitarias, la deforestación y la minería en zonas de conflicto empeoran la situación.
Sin embargo, hay esperanza de una Tierra en paz. Isaías 32:14-18 imagina una Creación pacífica en la que el pueblo de Dios vive sólo cuando se alcanza la justicia. La justicia del Señor habitará en el desierto, la rectitud de Dios vive en el campo fértil (cf. Isaías 32:16).
En palabras del arzobispo Desmond Tutu “La esperanza es poder ver que hay luz, a pesar de toda la oscuridad”.
Celebramos hoy este encuentro ecuménico en oración, como parte del Tiempo de la Creación, un tiempo ecuménico de oración y acción por nuestra casa común que tiene lugar cada año del 1 de septiembre al 4 de octubre.
El lema del Tiempo de la Creación de este año es “Paz con la Creación”, y el símbolo es “El jardín de la Paz”, inspirado en Isaías 32:18: “Mi pueblo vivirá en moradas de paz, en hogares seguros, en lugares de reposo tranquilos”. Sed bienvenidos al encuentro fraterno con el Señor.
I.- Tiempo de contemplación – Kyrie
Monitor:
Empecemos nuestra oración, recordando a todas las víctimas de las guerras actuales, de los desastres naturales por incendios, inundaciones, sequias y otras razones, pero muy especialmente por el daño que causamos en toda la Creación, no solo en el ser humano, también en los hábitats y ecosistemas que habita o explota, generando destrucción y extinción de especies, obra del Creador.
Además de vidas humanas, armamento hundido contaminando el mar del norte, Napalm en Vietnam, incendios provocados por las bombas. Los efectos de la guerra son también agentes destructores de nuestra casa común.
Ten piedad Señor de la humanidad y de toda la biodiversidad que sufren las terribles consecuencias de las guerras.
Cada 10 años, entre un 2 y u 6% de las especies que habitan el planeta desaparecen. Esta carrera desbocada afecta todos los ecosistemas y, en particular aquellos de los que dependen muchas comunidades humanas del sur.
Señor, todo ser viviente es criatura tuya y tú la amas. No nos dejes seguir contribuyendo a su destrucción, a nuestra destrucción.
Monitor:
Recitemos conscientemente y unidos esta oración de paz con la creación:
Creador de todo, te alabamos por el don de la vida y por la fe que nos une en el cuidado de nuestra casa común. Confesamos lo alejados que nos hemos vuelto: unos de otros, de tu Creación y de nuestra verdadera esencia. Reconocemos que nuestra codicia y nuestros impulsos destructivos han fracturado nuestras relaciones contigo, con los demás y con la Tierra. Los campos fértiles se han vuelto estériles, los bosques yacen desolados, los océanos y los ríos están contaminados. Las comunidades antes prósperas, ahora se han convertido en lugares de sufrimiento, y la Tierra y los más pobres claman tu auxilio.
Amado Cristo, que dijiste “Shalom” a los corazones atemorizados, anímanos a la acción compasiva. Inspíranos a trabajar por el fin de los conflictos, y por el pleno restablecimiento de las relaciones rotas— contigo, con la comunidad ecuménica, con la familia humana, y con toda la Creación.
Príncipe de la Paz, a través de tus heridas, enséñanos a ser solidarios con las heridas de los demás, especialmente de los más vulnerables y los pobres, también las heridas que infringimos a tu Creación y la biodiversidad que lo habita. En tu resurrección, haz de nosotros personas de esperanza, con una visión de espadas convertidas en rejas de arado y lágrimas transformadas en alegría.
CÁNTICO DE ALABANZA. LECTURA DEL CÁNTICO DEL HERMANO SOL
Monitor:
Vamos a orar alabando a Dios con el Cántico del Hermano Sol o de las Criaturas, que compuso S. Francisco en 1225. Estamos celebrando el Octavo Centenario. Estando ya Francisco muy enfermo, casi ciego y con fuertes dolores en los ojos, brotó de sus labios este Canto que abrazaba a todas las criaturas en una fraternidad universal, anhelando una creación nueva, en medio de un mundo desgarrado… Cuando sobrevino el conflicto entre el alcalde y el obispo de Asís, reunió a ambos e hizo que se cantará el Cántico en su presencia, añadiendo la penúltima estrofa en la que cantaba el perdón y la paz. La última, la compuso pocos días antes de morir alabando en ella al Señor «por nuestra hermana la Muerte corporal», a la que ya sentía como el camino hacia la plenitud de todo.
2 lectores (a dos coros)
Altísimo, omnipotente, buen Señor,
tuyas son las alabanzas, la gloria y el honor y toda bendición.
A ti solo, Altísimo, corresponden,
y ningún hombre es digno de hacer de ti mención.
Loado seas, mi Señor, con todas tus criaturas,
especialmente el señor hermano sol,
el cual es día, y por el cual nos alumbras.
Y él es bello y radiante con gran esplendor,
de ti, Altísimo, lleva significación.
Loado seas, mi Señor, por la hermana luna y las estrellas,
en el cielo las has formado luminosas y preciosas y bellas.
Loado seas, mi Señor, por el hermano viento,
y por el aire y el nublado y el sereno y todo tiempo,
por el cual a tus criaturas das sustento.
Loado seas, mi Señor, por la hermana agua,
la cual es muy útil y humilde y preciosa y casta.
Loado seas, mi Señor, por el hermano fuego,
por el cual alumbras la noche,
y él es bello y alegre y robusto y fuerte.
Loado seas, mi Señor, por nuestra hermana la madre tierra,
la cual nos sustenta y gobierna,
y produce diversos frutos con coloridas flores y hierba.
Loado seas, mi Señor, por aquellos que perdonan por tu amor,
y soportan enfermedad y tribulación.
Bienaventurados aquellos que las soporten en paz,
porque por ti, Altísimo, coronados serán.
Loado seas, mi Señor, por nuestra hermana la muerte corporal,
de la cual ningún hombre viviente puede escapar.
¡Ay de aquellos que mueran en pecado mortal!:
bienaventurados aquellos a quienes encuentre en tu santísima voluntad,
porque la muerte segunda no les hará mal.
Load y bendecid a mi Señor,
y dadle gracias y servidle con gran humildad.
II.- Tiempo de la Palabra
* Primera Lectura: Isaías 32:14-18
Lector/a:
La fortaleza será abandonada, y desamparada la ciudad populosa; para siempre convertidas en cuevas quedarán la torre y la fortaleza, convertidas en deleite de asnos salvajes, en pastizal de rebaños; hasta que desde lo alto el Espíritu sea derramado sobre nosotros, Entonces el desierto se volverá un campo fértil, y el campo fértil se convertirá en bosque.
La justicia morará en el desierto y en la tierra fructífera habitará la rectitud. El producto de la justicia será la paz, tranquilidad y seguridad perpetuas serán su fruto. Mi pueblo habitará en un lugar de paz, en moradas seguras, en serenos lugares de reposo.
* Segunda Lectura: Filipenses 4: 5-7
Lector/a:
Que su amabilidad sea evidente a todos. El Señor está cerca. No se preocupen por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.
CANTO DE ALELUYA (SIQUEM)
* Lectura del Santo Evangelio: Juan 14:15-17
Lector:
Jesús dijo: “Si ustedes me aman, obedecerán mis mandamientos. Y yo pediré al Padre y él les dará otro Consolador para que los acompañe siempre: el Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede aceptar porque no lo ve ni lo conoce. Pero ustedes sí lo conocen, porque vive con ustedes y estará en ustedes”.
SILENCIO (meditamos la palabra en silencio) (2 MINUTOS DE SILENCIO)
III.- Tiempo de la acción de gracias
Monitor:
“A continuación daremos gracias por todas aquellas semillas de paz y esperanza que hemos visto durante este año en los diferentes conflictos contra la creación de Dios”
Te damos gracias, Señor, por los corazones generosos que se abren para acoger a las personas migrantes y refugiados. Por aquellos que ayudan, acogen, ofrecen un hogar, un plato de comida y una mano amiga, reflejando tu amor y misericordia. Que su ejemplo inspire a más personas a construir un mundo más fraterno y compasivo.
R: Te damos gracias, Señor.
Padre amoroso, te damos gracias por las organizaciones y entidades que trabajan incansablemente en los países de origen para mitigar los efectos de la pobreza climática. Por aquellos que siembran esperanza a través de proyectos de reforestación, energías limpias y agricultura sostenible, ayudando a las comunidades más vulnerables a adaptarse y florecer. Te pedimos que fortalezcas sus manos y su espíritu.
R: Te damos gracias, Señor.
Por todos los que trabajan por cuidar de la creación luchando contra los incendios forestales. Por todos los bomberos, guardias forestales, cuerpos de seguridad y voluntarios desinteresados que, con todo su esfuerzo y comprometiendo su propia seguridad, trabajan incansablemente para frenar esta lacra que destruye nuestros bosques. Por todos ellos, por proteger la casa común de esta terrible amenaza.
R: Te damos gracias, Señor.
Te damos gracias, Dios de la paz, por todas las personas que trabajan incansablemente por la paz en el mundo, incluso arriesgando su propia vida. Te damos gracias de manera especial por los médicos, enfermeros y voluntarios que, en medio de la barbarie, se convierten en instrumentos de tu misericordia para sanar, consolar y salvar vidas. Te pedimos que los protejas y que su sacrificio inspire un cambio profundo en los corazones de la humanidad.
R: Te damos gracias, Señor.
Señor y Creador, te damos gracias por las organizaciones y entidades como Manos Unidas, Caritas, Justicia y Paz, Entreculturas… y tantas otras que nos ayudan a despertar la conciencia sobre el cuidado de nuestros hermanos más vulnerables y de nuestra Casa Común. Te pedimos que sigas bendiciendo su labor de sensibilización y movilización, para que más personas se unan a la tarea de construir un mundo donde la justicia y la dignidad sean para todos.
R: Te damos gracias, Señor.
CANTO: LAUDATE OMNES GENTES (cada tres acciones de gracias)
IV.- Tiempo del compromiso
Monitor:
Desde su espiritualidad y las lecturas oídas, escucharemos a continuación a los representantes de las iglesias cristianas hermanas participantes que nos hablarán de su compromiso eclesial para transmitir la paz y nuestra esperanza en Cristo:
- Representante de la Iglesia Ortodoxa
- Representante de la Iglesia Española Reformada Episcopal.
- Obispo de la Iglesia Católica Romana.
* ORACIÓN DEL PADRENUESTRO (Cada uno según su tradición)
Monitor:
“Invitamos a todos los presentes a orar con la oración universal que nos une y nos identifica como seguidores de Cristo. Cada uno en su idioma y conforme a su tradición.”
* GESTO DE PAZ
Monitor:
“Ahora los líderes que nos presiden nos invitan a darnos la paz, después de la siguiente proclamación”
Los obispos juntos proclaman:
La paz de Dios sea con todas y todos ustedes.
Respuesta: En la justicia de Dios está nuestra paz.
Hermanas y hermanos,
Cristo nos llama a vivir en unidad recíproca y con toda la Creación.
Respuesta: Buscamos vivir en el espíritu de Cristo.
Daos mutuamente un gesto de paz
CANTO DURANTE LA PAZ
LLAMAMIENTO ECUMÉNICO A LA PAZ JUSTA. GINEBRA 2011
Monitor:
(A continuación leeremos un extracto del “Llamamiento Ecuménico a la Paz Justa” elaborado por el Consejo Mundial de Iglesias. Aceptado, aprobado y recomendado para el estudio, la reflexión, la colaboración y la acción común por el Comité Central del CMI, en febrero de 2011, Ginebra, Suiza)
Lectura por parte de los tres Líderes cristianos
Lector 1: Iglesia Ortodoxa
Por la paz con la Tierra: para que se preserve la vida.
Dios creó el mundo y lo hizo uno, ofreciendo a la humanidad la vida en toda su plenitud. Sin embargo, el pecado rompe las relaciones entre las personas y con el orden creado. La Creación anhela que los hijos de Dios sean administradores de la vida, la justicia y el amor (Génesis 2:1-3; Juan 10:10; Romanos 8:20-22).
Lector 2: Iglesia Española Reformada Episcopal
33. Desafíos mundiales. Los seres humanos han de respetar y proteger la Creación. Pero la avaricia a muchos niveles, el egocentrismo y la confianza en el crecimiento ilimitado han llevado a la explotación y destrucción de la Tierra y sus criaturas. Los llantos de los pobres y vulnerables resuenan en los gemidos de la Tierra. El consumo excesivo de combustibles fósiles y otros recursos limitados está causando violencia a las personas y el planeta. El cambio climático como consecuencia de los estilos de vida de los humanos representa una amenaza mundial para la paz justa. El calentamiento global, la subida del nivel del mar y la creciente frecuencia e intensidad de las sequías y las inundaciones afectan sobre todo a las poblaciones más vulnerables del mundo. Los pueblos indígenas son ejemplares por su forma de vida sostenible y, junto con los habitantes de los atolones de coral y las empobrecidas comunidades costeras, figuran entre los que menos contribuyen al calentamiento global. No obstante, son los que más sufrirán.
Lector 3: Iglesia Ortodoxa
34. Orientaciones principales. Cuidar del valiosísimo don divino de la Creación y luchar por la justicia ecológica son principios clave de la paz justa. Para los cristianos, también son una expresión del llamamiento del Evangelio a arrepentirnos del despilfarro de los recursos naturales y a convertirnos diariamente. Las iglesias y sus miembros tienen que ser cautos con los recursos de la Tierra, especialmente con el agua. Debemos proteger a las poblaciones más vulnerables al cambio climático y ayudar a salvaguardar sus derechos.
Lector 4: Iglesia Católica Romana
35. Los miembros de la iglesia y las parroquias de todo el mundo deben evaluar su impacto ambiental de manera autocrítica. Los cristianos tienen que aprender, individualmente y en las comunidades, a vivir de maneras que permitan a toda la Tierra prosperar. Se necesitan muchas más congregaciones ‘ecológicas’ e iglesias ‘verdes’ en el plano local. Se requiere mucha movilización ecuménica a nivel mundial para la implementación de acuerdos y protocolos internacionales entre Gobiernos y empresas a fin de garantizar una Tierra más habitable no solo para nosotros, sino también para todas las criaturas y para las generaciones futuras.
Juntos: ¡Dios de vida, guía nuestros pasos por el camino de la paz justa!
Monitor:
Esperanzados con este compromiso ecuménico, reforzados por el Espíritu Santo, procedamos a ser constructores de Paz, a través de la práctica de la Justicia, para transmitir nuestra esperanza en Cristo y su Evangelio.
Que nuestras buenas acciones, para ayudar a sanar el dolor de la humanidad y el de toda la biodiversidad amenazada con su extinción, sean signo de conversión para los que las practican y las contemplan.
Para ello, recibiremos la bendición de nuestros hermanos y obispos en Cristo.
BENDICIÓN FINAL. RECITADO CONJUNTAMENTE POR LOS OBISPOS Y/O REPRESENTANTES.
Monitor:
“A continuación los líderes cristianos que nos presiden nos darán la bendición basada en la Liturgia de la Iglesia siríaco-maronita antioquena. Anáfora de Santiago, Hermano del Señor”
Epíscopos/ Presbíteros:
Demos gracias y alabemos a la Santísima y Gloriosa Trinidad, al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
Todos:
Es correcto y justo.
Epíscopos/ Presbíteros:
Es justo glorificarte, bendecirte, alabarte, adorarte y darte gracias, oh Creador de todas las cosas, visibles e invisibles. Te alaban los altos cielos y todas sus potencias; el sol, la luna y todas las estrellas; la tierra, los mares y cuanto hay en ellos, la Jerusalén celestial y la asamblea de los primogénitos que están inscritos en el cielo; cantan los ángeles, los arcángeles y las huestes celestiales, alabando tu majestuosa gloria con himnos triunfales, con voces interminables y con aclamaciones.
Todos:
Es correcto y justo.
Epíscopos/ Presbíteros:
Con ellos y con toda la Creación clamamos y proclamamos:
Todos:
Santo Dios. Santo Poderoso. Santo Inmortal. Ten piedad de nosotros.
Santo Dios. Santo Poderoso. Santo Inmortal. Ten piedad de nosotros.
Santo Dios. Santo Poderoso. Santo Inmortal. Ten piedad de nosotros.
Epíscopos/ Presbíteros:
Id en paz, hermanas y hermanos, vivid en paz con la Creación… Y que os acompañe la bendición de la Santísima Trinidad: El Padre, y el Hijo, y el Espíritu Santo, el único Dios, a quien sea la gloria, por los siglos de los siglos.
Todos:
Amén.
CANTO FINAL DE ENVIO