Nota de Prensa de Enlázate por la Justicia
En la culminación de la COP26, las entidades católicas de desarrollo refuerzan su camino común para promover esfuerzos por una lucha justa contra el cambio climático.
Un camino de casi 50 años desde la cumbre sobre medio ambiente de las Naciones Unidas de Estocolmo contempla la reciente COP26 de Glasgow, y es mucho todavía lo que queda por recorrer. Las entidades católicas de desarrollo unidas en Enlázate por la Justicia formada por Cáritas, CONFER, CEDIS, Justicia y Paz, Manos Unidas y REDES, y tras un reciente encuentro territorial con la presencia de grupos de más de 20 diócesis, hacen suya la advertencia del Papa Francisco a las partes reunidas en Glasgow de que “el tiempo se está acabando”.
El objetivo del Acuerdo de Paris de 2015 de no incrementar la temperatura media del planeta desde el inicio de la era industrial hasta el año 2100 en más de 1,5ºC, se aleja ante la dificultad de los firmantes para rubricar los complejos acuerdos multilaterales que se requieren para definir las medidas concretas para abordarlo.
Una crisis socio-ambiental injusta
Desde su trabajo de cooperación con comunidades empobrecidas, las entidades Enlázate por la Justicia buscan poner de relieve el carácter socio-ambiental de la crisis. No es posible abordar las soluciones a la crisis sin un enfoque transversal que contemple, por ejemplo, cómo las causas ambientales están detrás de las llamadas migraciones climáticas.
En segundo lugar, Enlázate por la Justicia subraya la injusticia inherente a la crisis climática. Por un lado, porque el 50% más pobre del planeta es responsable del 1% de las emisiones mientras que el 1% más rico emite el 70% de los gases de efecto invernadero. Y por otro, porque son las comunidades más vulnerables quienes sufren sus consecuencias en forma de desertificación y sequía entre otras.
La voz de la sociedad civil en los caminos para el acuerdo
La expectación creada por la cumbre, pone de manifiesto la preocupación de la sociedad civil por los resultados a los que lleguen los mandatarios. Se trata de una muestra de la importancia de la movilización de la ciudadanía, aún insuficiente, y de las organizaciones de la sociedad civil por este proceso en concreto.
Las principales demandas que se han venido haciendo escuchar han sido el incremento, y sobre todo el cumplimiento, con los mecanismos de “Financiación climática” en proyectos de mitigación y de adaptación ante el cambio climático, con importancia para la compensación de pérdidas y daños en los países más pobres. Por otro lado, el clamor de la sociedad civil reclama también medidas relacionadas con la transformación de los sistemas de producción y consumo de alimentos que están directamente relacionados con el 30% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
En este contexto de movilización y conciencia ciudadana, las entidades promotoras de Enlázate por www.enlazateporlajusticia.org la Justicia reclaman una escucha atenta a estas advertencias y una mayor posibilidad de participación en los procesos de definición de los acuerdos y en el acceso a unos fondos que quedan casi en exclusiva reservados a los estados.
No desperdiciar la oportunidad de un consenso global incontestable y caminar juntas…
Este clamor ciudadano constituye una oportunidad histórica para conducir la voluntad política y los esfuerzos de cambio de las estructuras y los estilos de vida en nuestras sociedades hacia un sistema más cuidadoso con la casa común.
Siendo consciente de la complejidad de los acuerdos que se requieren, Enlázate por la justicia valora los esfuerzos en la lucha contra la deforestación y las emisiones de metano, así como el incremento y mejora de la distribución de la dotación de los fondos climáticos. Por otro lado, el compromiso de revisión anual de los objetivos para adecuarse al límite de calentamiento global también se entiende como positivo, con la cruz de que no se ha logrado un paso firme en la descarbonización, pues no se logró la eliminación del carbón como fuente de energía, también es un lastre que los acuerdos no sean vinculantes, ni sobre todo respondan con la urgencia que la situación exige.
Las entidades de Enlázate por la Justicia continúan apostando por la suma de esfuerzos desde su base social y su presencia territorial colectiva hasta su capacidad institucional para incidir en la Iglesia y la sociedad y sus instituciones y representantes en lucha por una justicia climática acorde con la crisis que vivimos. Porque “el tiempo se está acabando y esta oportunidad no debe desperdiciarse, para que no tengamos que enfrentarnos al juicio de Dios por no haber sido fieles administradores del mundo que nos ha confiado” (Carta del Papa Francisco a los mandatarios participantes en la COP26).