Desde el 1 de septiembre hasta el 4 de octubre (coincidiendo con la celebración de San Francisco de Asís), cristianos de todo el mundo celebraremos el llamado Tiempo de la Creación, este año bajo el lema: ¿Un hogar para todos y todas? Renovando el Oikos de Dios.
Bajo el lema de este año, el comité ecuménico internacional, del cual forma parte el Vaticano a través del Dicasterio para la Promoción del Desarrollo Humano Integral, nos plantea esta pregunta ¿un hogar para todos y todas? y nos adelanta una pista de acción: renovando el Oikos de Dios.
La Pandemia del COVID-19 nos ha dejado claro que, ante los grandes retos de la humanidad, debemos responder desde la esperanza de la Fe y desde la cooperación internacional y local, para favorecer la investigación y creación de vacunas adecuadas, pero también para concienciar a la ciudadanía de la importancia de colaborar con la aplicación de las medidas establecidas, en base a proteger el bien común de toda la sociedad.
De la misma manera, la humanidad afronta también otros retos globales como la desigualdad social, la pobreza, la crisis alimentaria, el cambio climático y nuestra errónea forma de consumir y producir, que afecta directamente a la sostenibilidad de los ecosistemas y a la perdida de biodiversidad que nos sustenta.
Retos que también requieren de la movilización ciudadana y muy especialmente, de los que nos consideramos cristianos católicos, siendo coherentes con nuestra fe. Es por lo tanto urgente y muy importante, la implicación de todo el Pueblo de Dios en estas tareas… desde el obispo al laico, pasando por todos los carismas y estilos de vida consagrada.
El Dicasterio para el Desarrollo Humano Integral del Vaticano, conjuntamente con el Movimiento Laudato Si’ y diferentes diócesis y organizaciones eclesiales (entre ellas la Archidiócesis de Madrid) ha lanzado una Plataforma de Acción Laudato Si’ que nos ayudará a desarrollar acciones para afrontar los retos anteriores.
Apoyados en esta Plataforma y en los Objetivos Laudato Si’, nos disponemos a preparar el camino de los próximos siete años, fomentando ante todo el cambio en nuestros estilos de vida, confrontando nuestra fe con el Evangelio y con las necesidades actuales del mundo, para que realmente se establezca el verdadero reino de Dios y su justicia.
Os animamos a vivir este Tiempo de la Creación orando, contemplando las bondades de la Creación y practicando una nueva forma de vivir que nos permita un consumo más austero y una mentalidad abierta al encuentro con el diferente. Un estilo de vida solidario, abierto a la colaboración, para afrontar unidos los retos más importantes de nuestro tiempo, restaurando el Oikos de Dios, reconociendo que la humanidad y el resto de la biodiversidad guardan una estrecha y desconocida interrelación y tienen cabida por igual y de forma digna, en nuestra Casa Común, el hogar que Dios concedió a toda la Vida por el soñada.