La ecología del aplauso

No sé de dónde vino la idea, ni quien la propuso. Supongo que será una de esas iniciativas que han pasado de una ocurrencia anodina a un hecho social sin precedentes. Todos los días, a las 20 h., salimos con entusiasmo a aplaudir a las personas que cuidan de nosotros en este periodo de confinamiento. Parecemos emerger de las catacumbas, de unas viviendas que parecen… Continúa leyendo…